A lo largo de casi tres semanas de intensa actividad se desarrolló en Australia el Campeonato Mundial de Salvamento Acuático Deportivo, evento en el que se dieron cita varios exponentes argentinos, entre ellos tres representantes surgidos de la Asociación Mutual Guardavidas Argentinos Asociados de Lanús, que no sólo mostraron su destreza del otro lado del planeta sino que también se llevaron medallas al por mayor.

Quien valoró la performance del equipo en general fue Camila Coronel, joven que ya contaba con una labor en otra cita ecuménica en 2018, pero que ahora, con más experiencia, posibilitó la obtención de varias preseas, seis en total en su cuenta personal, con cuatro en el formato individual y otras dos en postas.

“La verdad que me había preparado y estuve entrenando bastante pero la realidad es que uno no sabe con lo que se va a encontrar. Por eso mi objetivo principal siempre fue ir, darlo todo y que se vayan dando los resultados, especialmente bajar mis marcas”, señaló.

Y vaya si logró las metas, que se subió al podio en un puñado de oportunidades durante los tres días que tuvo acción, en el marco de un itinerario que evidenció la participación de una decena de especialistas albicelestes.

En ese sentido, la dama puntualizó en lo que implicó la aventura en la Costa de Oro, uno de los espacios más paradisíacos del globo. “Ya poder viajar era un logro muy importante y, fundamentalmente, quería disfrutar la competencia, más allá de los nervios que podía tener”, comentó.

Y añadió, indicando que ya contaba con bagaje en el continente asiático: “En 2018 viajé e hice una capacitación. Y había ido al Mundial pero yo no tenía el mismo nivel que ahora. En esta oportunidad ir al mismo lugar donde aprendí muchas cosas, me capacité y en el espacio en el que están los mejores del mundo porque es la cuna del deporte, significó un montón”.

Ya al momento de analizar sus lauros, fue elocuente. “La verdad que quería ganar algo y pude sumar dos medallas en equipos y cuatro individuales, y todo fue un logro muy importante por el nivel de competencia que había”, sostuvo.

El itinerario consistió en tres jornadas de pileta y otras tres de playa, con las variantes que implica y las diversas categorías a cumplimentar. Y en ese bloque la joven de la región se destacó con preseas tanto de oro, de plata como de bronce, completando una saga que la erigió como una de las piezas de mayor crecimiento en la disciplina durante la grilla.

Por caso, puntualizó en algunas labores que derivaron en la obtención de los premios, como su actuación como socorrista el primer día, o los metros de arrastre, en los que se elevó a la cima en la divisional que afrontaba el desafío con maniquí y aleta, situación que la expone como una referente versátil en el agua.

A su vez, valoró el desempeño grupal, y destacó a sus compañeras Viviana Tevez y Marisol Cerisola, pues “ambas bajaron sus marcas y estuvieron entre las top”, un objetivo que tanto la protagonista como sus colegas lanusenses ubican como un ítem trascendental.

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Deporte

Por otro lado, y más allá de lo que sucedió en Australia, la joven recibida en AMGAA y que actualmente trabaja como guardavidas en la temporada veraniega en Mar del Ajó, disfruta con la especialidad que sostiene. Y la describe, según su visión, indicando que “no es sólo nadar”.

“Todas las pruebas se relacionan con simulacro de algún rescate, por eso se agrega maniquís llenos o por la mitad, y aletas. A su vez, en las postas no todos hacen lo mismo y se juega con la destreza de cada uno, que hacen cosas distintas, como traer compañeros, usar aleta, entre otras cuestiones de estrategia”, comentó.

Y las tandas en playa o en aguas abiertas también se evidencian arduas, dado que se corren dos kilómetros y están las pruebas más intensas como las denominadas Ocean, que son todas las pautas juntas, con los elementos específicos. “Todo es complejo, porque no es natación nada más, hay muchos factores que influyen, cómo resolver cómo llevar a la víctima, etc”, sentenció.

Sin embargo, el puntal elemental es “la prevención del ahogamiento”. “Todo  va a de la mano esa cuestión, que es una de las principales causas de muerte en el mundo”, afirmó. Y añadió: “Eso es bueno porque el deporte está apuntado a guardavidas pero lo puede realizar cualquier persona sin importar la edad, y para los chicos está bueno porque se meten en este ambiente y pueden aprender a resolver situaciones por su propia supervivencia, algo fundamental”.