La muerte de un jubilado de nacionalidad rusa en la localidad de Lanús generó conmoción en la comunidad. Sin embargo, el Municipio desmintió que se haya tratado de un hecho delictivo tras conocerse el informe de la investigación policial.
El caso se originó el 24 de enero de 2025, a las 17:30 horas, cuando un vecino solicitó una ambulancia al 911 tras escuchar pedidos de auxilio de una vivienda ubicada en la calle Acevedo. Al ingresar al complejo, encontró al hombre tendido en el suelo y desorientado. En ese momento, la víctima manifestó haber sido víctima de un ilícito.
Según el informe de la investigación penal preparatoria número 2084-25, la puerta de acceso al domicilio se encontraba cerrada con llave, lo que llevó a las autoridades a analizar las cámaras de videovigilancia que había en la vivienda. Las imágenes mostraron que nadie ingresó ni salió de la vivienda en el período comprendido entre las 6:47 de la mañana y las 17:20 horas, cuando el vecino encontró a la víctima.
El personal policial y el servicio de emergencias médicas SAME llegaron al lugar y trasladaron al hombre al Hospital Evita, donde lo internaron por un cuadro de colangitis con ictericia, con niveles de bilirrubina elevados, bradicardia y somnolencia. Además, las autoridades informaron que presentaba “lesiones autoinfligidas en las muñecas”. Todos los elementos relacionados con la investigación fueron secuestrados.
El testimonio de los vecinos también fue clave en la causa, ya que ninguno reportó haber visto movimientos sospechosos ni haber escuchado ruidos extraños.
Por otra parte, la autopsia confirmó que la causa de muerte no fue traumática y que no había indicios de violencia en la vivienda, ya que no se encontraron puertas ni ventanas forzadas. Con estos resultados, el Municipio de Lanús desmintió que se tratara de un hecho.